Sanofi

Inspirate: Ahsan

Contar una historia está en el corazón mismo de nuestra cultura como seres humanos, pero pocos de nosotros tenemos la oportunidad o el placer de perseguirlo como trayectoria profesional. Ahsan, poeta, escritor y director del Festival Literario Dhaka, nos habla de su viaje literario, y de todos los altibajos que ha experimentado con los años.

¿Cómo comenzó su carrera como narrador?

Se puede decir que la narración es mi pasión, y es por eso disfruto de las tres cosas que ocupan la mayor parte de mi tiempo: escribir, organizar un festival literario, y el funcionamiento de una empresa de relaciones públicas. Sin embargo, cuando me gradué, no encontré el trabajo ideal, ni tenía la experiencia para iniciar un negocio. Al igual que la mayor parte de mi curso, me uní a la industria bancaria.

La ciudad de Londres era vista como el espacio codiciado para cualquier persona con un título en Economía o Finanzas. La competencia por un puesto era intensa. Tuve éxito sólo para darme cuenta que mi corazón no estaba en eso. Al igual que muchos de mis colegas, enfrenté la situación y seguí trabajando - hubo algunos aspectos del trabajo que me gustaron, pero por sobre todo resultó ser monótono. Me quedé ahí por 10 años antes de decidir comenzar mi propio negocio en el Lejano Oriente. Vino entonces la pregunta de cómo utilizar los ahorros, o en dar el paso o comprar una casa. Elegí lo primero como siempre he creído en el mantra: “la fortuna favorece a los valientes”.

Después de dos años en Malasia y Singapur, sin avances importantes en los productos de mi empresa comercial, me vi obligado a cerrarlo y volver a Londres. Mis ahorros se habían agotado y volví a un mercado que me ofrecería puestos de trabajo en bancos. Los reclutadores, por desgracia, a menudo pierden la idea de las habilidades transferibles, por lo que decidí tomar mi propio camino. Y eso es algo que reitero a todos los que aspiran a ser empresarios: si tienes confianza en ti mismo, que nadie te detenga!

¿Qué dificultades tuvo que superar?

La principal dificultad o desafío fue lo inevitable; la creación de un nuevo negocio inicialmente sin personal, sin oficina y sin pistas existentes para conseguir clientes. Como todo mercado, es extremadamente difícil instalarse y ganar la confianza de un cliente. En relaciones públicas y marketing, no hay ningún producto tangible, por lo que uno tiene que realmente comprar a la persona y su / sus ideas antes de aceptar trabajar juntos. El otro aspecto es que todos los resultados son longitudinales. Estos son algunos de los problemas comunes que enfrenta cualquier nueva compañía de Relaciones Públicas, en cualquier parte del mundo.

¿Qué lo impulsó o lo inspiró?

Fue un hecho simple: o bien hacer que el negocio funcionara o volver a encontrar un empleo. Había estado durante mucho tiempo soñando con iniciar y construir mi propio negocio. Sabía que era ahora o nunca; de vida o muerte. Cuando los seres humanos son empujados a ese extremo, todo cae repentinamente en su lugar, tal vez incluso el Universo responde dándote una mano.

Qué consejo “ le daría a alguien ” que está empezando?

Sé decidido y tratá de rodearte de personas con mentalidad positiva.

¿Tiene alguna cita motivacional favorita?

El pesimista se queja del viento; el optimista espera que cambie; el realista ajusta las velas.

--William Arthur Ward